martes, 1 de agosto de 2017

Lo justo y preciso

Por: Alfredo Jurado


Resulta incómodo. No por nada, cuando se nos pide confesarnos en una Iglesia, en frente de la feligresía (de la que solemos ser parte), nos preguntamos y decimos a quien dirige la misa: “Es justo y necesario”. Sin querer entrar en temas esotéricos, lo “justo y necesario” se vuelve imperativo por el hecho de tener que afrontar, aceptar y reconocer errores, desvíos, desaciertos…aceptando el hecho de la rectificación, del volver en nuestros pasos. En definitiva: en ver en nosotros mismos la capacidad de errar, de transgredir…de fracasar. Y por dicho fracaso, necesitamos recapacitar, recapitular, volver a hacer las cosas (aquel dicho de “el flojo trabaja doble” tiene su sentido), que en muchos momentos resulta tedioso y agotador…aquí el tema del tiempo juega un papel importante supongo. Lo cierto es que, así nos parezca tedioso y doloroso, está ya depositada en nosotros la tarea de reiniciar y hacerlo todo mejor. Y aquí entro en el tema de lo “preciso”. Aunque digamos justo y necesario debemos también caer en cuenta en lo que es lo “preciso”. En lo personal, pienso que lo preciso viene en concordancia con el momentum, a ese instante particular en el cual, luego de él, no hay marcha atrás, todo cambia, en síntesis: un punto de inflexión. Si acaso desechamos ese momento, quizás y estemos perdiendo una valiosa oportunidad que en definitiva cambia nuestra perspectiva del mundo en general. Eso que es preciso, a veces llamado “lo justo”, pretende dejar una importante lección en nuestro ser que no debemos desdeñar. Así, y dependiendo de cómo y de quién venga, lo preciso se vuelve un mandato de acción, o un castigo de transgresión, puesto que determina el resto de las acciones por venir. Y dichas acciones también responden a otra máxima: para después será peor. Es decir, aprovecha el tiempo, o si no, la lección dejada y aprendida; pero no es aceptable ni menesteroso prolongar lo inevitable, procrastinar es un delito, que el juez del tiempo castiga sin impunidad.

2 comentarios:

  1. Excelente....felicitaciones por la vuelta a las letras!!!!

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  2. Felicitaciones, quizás porque primero te conocí por tus escritos, me alegra y espero leer lo que escribas, pues para mi, tu eres más auténticamente tu cuando escribes que cuando hablas, tu discurso oral contiene aún mucha timidez y necesidad de ser aprobado, tu famoso "yo lo sé" te cierra muchas posibilidades al dialogo. Bienvenidos tus escritos, y aspiramos a que distancies tus "Yo lo se".

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